Christian Quinteros cuenta que todo inició porque no quería desaprovechar un respaldo de cama, pero “ahora ya estoy empezando a formalizar esta idea en negocio”.
Cada día es diferente para Christian Quinteros Jofré. Por lo usual, sus clases de educación física a niños de primero a quinto básico del colegio Antofagasta International School comienzan a eso de las 10:00 horas o a las 14:00 horas. En ambos casos, el antofagastino de 36 años decide levantarse temprano para adelantar su otro trabajo: la fabricación de tablas de equilibrio que realiza desde el techo de su edificio.
La idea particular que Quinteros jamás pensó que, a raíz de una idea para reutilizar un pedazo de madera que tenía en su hogar, se podría gestar un emprendimiento.
El docente, que conversó con SoyAntofagasta.cl contó que, “jamás pensé que esto tomaría la forma de un negocio, todo partió por mi incapacidad de quedarme tranquilo en casa (risas), porque la verdad, había desocupado hace poco el respaldo de mi cama, pero no lo quería botar como si nada, quería buscar si podía aprovechar mejor ese material y como soy profe, me gustan los deportes, de hecho práctico bodyboard, se me ocurrió hacerme una tabla de equilibrio conocidas como balance board”.
Fue así como inició la fabricación de la primera tabla, sin pensar que sus amigos también se sumarían a este mismo deporte. “Me pasó que con la primera que hice, mis amigos me pidieron si podía hacer más, así que, para esa vez, fui a comprar una plancha de madera y aprovechando que eran como las primeras creaciones, les hice unos detalles a cada uno, pero más allá de eso, no pensé se difundiría”, acotó el emprendedor.
Trabajo desde las alturas
Como fue una idea que no tenía por intención ser un negocio, Christian decidió utilizar los recursos y espacios que dispone para poder formalizar este trabajo. Y es que, tras intentarlo varias veces, “me di cuenta que el departamento se me estaba haciendo pequeño para estos trabajos, y como vivo en el último piso de mi edificio se me ocurrió subir al techo y ver si podía instalarme allá (…) me conseguí una escalera y subí, arriba no había nada, así que de a poco logré subir una silla, una mesa de carpintería y transformarla en mi espacio de trabajo”.
Una ‘oficina’ bastante particular que llamó la atención de vecinos del sector, quienes en varias oportunidades se contactaron con el docente de extremo a extremo para consultar sobre el trabajo que realiza. “De hecho, un día, unos chicos me gritaron desde otro extremo para preguntarme qué estaba haciendo, les conté y me gritaron que sería buena idea que agregara un número y de ahí se me ocurrió de forma escribir en un cartón mi teléfono”, sostuvo.
Actualmente Christian está ampliando su cartera de clientes, “de a poco vamos subiendo los pedidos, el viernes estaba con cerca de 12 tablas que debía realizar, pero como estoy recién partiendo hago solo la cantidad que sé que será vendida”.
En cuanto al valor, el profesor de educación física indicó que tiene un valor de $20 mil, monto que contempla la tabla, un rodillo de madera y un cubrepiso. “Eso sí, el único detalle es que los productos deben retirarse en mi domicilio, los días sábados (…) la idea es que la gente encargue dentro de la semana y yo el finde las entrego listas”.
Consultado por la utilidad de producto, el docente explicó que “tiene bastantes beneficios tales como mejorar el equilibrio, la coordinación e incluso la concentración para hacer los movimientos, además de mucho trabajo de core (músculos abdominales)”.
Para quienes deseen adquirir una tabla balance board, pueden contactarse con Christian a su número +569 99080269 o también a través de su Instragram @christianquinteross.
Fuente: soychile.cl